WINDHOEK, Namibia, 11 de mayo de 2017 (LWI) – “La comunión mundial luterana integrada por 74 millones de miembros marca los 500 años de la Reforma como un hito y no como un destino, mientras sigue dando su testimonio hacia un mundo fracturado”, declaró el Secretario General de la Federación Luterana Mundial (FLM), Rev. Dr. Martin Junge.
“La Reforma continúa”, insistió Junge en un informe entusiasta y optimista a la Duodécima Asamblea de la FLM, reunida en Windhoek, Namibia, el 11 de mayo. Hablando a los/as 800 participantes entre entre quienes se incluye a 324 delegados de las 145 iglesias miembro de la FLM, subrayó la naturaleza global y ecuménica de la Reforma constante.
“De todos los rincones del mundo hemos venido a reunirnos aquí y representamos de formas tangibles una Comunión Mundial de Iglesias arraigada en el culto, basada en nuestra tradición teológica y que da un testimonio activo del Evangelio de Jesucristo.
“Libres por la gracia de Dios, somos una comunión en Cristo que vive y trabaja por un mundo justo, pacífico y reconciliado,” enfatizó Junge, haciendo referencia al tema de la Duodécima Asamblea que tiene lugar en Namibia del 11 al 16 de mayo.
La Asamblea es hospedada de manera conjunta por las tres iglesias miembro de la FLM en el país, bajo el paraguas de su Consejo de Iglesias Unidas – Iglesias Evangélicas Luteranas de Namibia.
“Aquí estamos, o más bien deberíamos decir, hasta aquí hemos llegado, al final de un capítulo rico e importante de la historia de 500 años de la Reforma y casi 2000 años de ser Iglesia. Hasta aquí llegamos, dispuestos a poner nuestros pies en el próximo siglo”, dijo entusiasmado.
No hay ningún motivo para perder la esperanza
Dando testimonio en un tiempo en que la familia humana global está fragmentada y la polarización muchas veces se reviste de lenguaje religioso, Junge dijo que la FLM expresa su solidaridad a las iglesias miembro que dan testimonio en medio del sufrimiento[P1] . “Tiempos ambivalentes reclaman posiciones claras de nuestra comunión luterana. ¿De qué lado estamos? ¿Qué valores defendemos? ¿Qué testimonio queremos dar?,” preguntó el Secretario General.
Su respuesta es un reflejo del compromiso de la FLM, por causa de “Jesucristo, el que vino a liberarnos,” dijo, “no hay motivo alguno de perder la esperanza ni para dejarse descarrilar por fuerzas que separan a las comunidades”.
Y continuó: “Hoy en día, consciente de su vocación que emana de la fe, se solicita a la FLM por sus dones particulares, reconocida como organización basada en la fe y apasionada por la paz, la justicia y la reconciliación en este mundo,” dijo. Mencionó los significativos aportes que realizó la FLM en la redacción de la declaración interreligiosa “Acoger al extranjero”, emitida por el ACNUR con la colaboración de la organización Socorro Islámico Mundial.
Junge dijo que el trabajo humanitario de la FLM en 24 países alrededor del mundo en colaboración con la ONU y otros asociados, actualmente brinda asistencia a 2,5 millones de personas. Hizo así referencia a la respuesta que se está dando a las actuales emergencias de alto nivel en el norte de Irak, Siria y Yemen, a través de sus operaciones en Djibouti y Jordania, así como a personas buscando refugio y huyendo de conflictos en lugares como la República Centroafricana, el Chad, Colombia y Sudán del Sur.
Inclusión intencional de mujeres y jóvenes
Hoy la comunión mundial de iglesias luteranas está marcada por la activa inclusión de jóvenes y mujeres. La juventud lidera la comunión en lo que se refiere al cambio climático y el movimiento de justicia de género en favor de la plena inclusión de las mujeres en el liderazgo de la Iglesia continúa.
Refiriéndose a la meta de la FLM de avanzar hacia la plena inclusión de las mujeres en el Ministerio Ordenado, dijo que “es el momento oportuno de dejar de referirse a versículos aislados de la Biblia para defender el exclusivismo masculino en el Ministerio Ordenado.”
Junge enfatizó la necesidad de que la participación global de la mujer y la juventud esté arraigada en la participación local. “Esa participación no debería considerarse como el cumplimiento de un cupo impuesto por extranjeros, sino como una cuestión de ser plenamente Iglesia.” La situación de la juventud en el mundo se complica cada vez más, siguió diciendo. Y se preguntó: “Si la situación actual no ofrece mucho futuro a la juventud, ¿qué futuro podría tener nuestro hogar común?” Esa frase también se aplica a la juventud en la Iglesia, agregó.
Una comunión que crece y cambia
Por primera vez en la historia de la FLM sus iglesias miembro más grandes no proceden del norte, sino que son de África, con la Iglesia Evangélica Etíope Mekane Yesus y la Iglesia Evangélica Luterana en Tanzania como las dos iglesias más grandes.
Aun cuando Alemania fue el lugar de nacimiento de la Reforma, Junge insistió en que hoy la Reforma constante no tiene un solo centro: “La FLM no debería tardar en crear plataformas y procesos de misión acordes con su actual índole policéntrica,” dijo.
“Oramos a Dios por su fuerza y pasión por la misión, por la gran cantidad de sus miembros, laicos y ordenados que se comprometieron a dar testimonio del Evangelio de Jesucristo. Este crecimiento viene acompañado de importantes dificultades, entre ellas, la sostenibilidad de la formación de líderes y la educación teológica.”
Global y ecuménica
La Asamblea se está reuniendo por segunda vez en África, 40 años después de la Asamblea de 1977 en Dar es Salaam, Tanzania. Un momento culminante será la Conmemoración Global de la Reforma en el estadio de Sam Nujoma el 14 de mayo, que sigue a la histórica Conmemoración Conjunta Católico-Luterana de la Reforma en Suecia en 2016. Subraya de ese modo cómo la Reforma ha llegado a convertirse en una ciudadana global.
“La Conmemoración conjunta representa el punto de inflexión visible, un paso deliberado para apartarnos del conflicto que tanto marcó nuestro pasado, y abrirnos así al futuro de la comunión a la que Dios nos llama,” enfatizó Junge. También se refirió a otros hitos ecuménicos como la acción relativa a los anabaptistas en la Undécima Asamblea de 2010 y las discusiones de Metodistas, Anglicanos e Iglesias Reformadas sobre la Declaración Conjunta Católico-Luterana sobre la Doctrina de la Justificación de 1999.
Hoy la Reforma es una ciudadana global, dijo el Secretario General, y como comunión de iglesias conmemoramos el aniversario de la Reforma en un espíritu de responsabilidad ecuménica y conscientes de que la misión de Dios es constante y que por eso también la Reforma es constante.
Informe Completo del Secretario General a la Asamblea (coming soon)
